Cirugía Percutánea
¿Qué es la cirugía percutánea del pie?
La cirugía percutánea, también conocida como cirugía de incisión mínima o cirugía MIS por sus siglas en ingles (minimal invasive surgery), es una cirugía que se realiza a través de incisiones de piel de 2 a 3 mm a través de los cuales podemos introducir instrumentos adecuados para cortar o rasurar los huesos, realizar cortes a nivel de los tendones o liberación de las articulaciones. Esta cirugía es erróneamente identificada por algunas personas como “cirugía láser del pie”.
Con este tipo de procedimientos podemos corregir la mayoría de los padecimientos de los pies de nuestros pacientes como son:
- Los juanetes o Hallux Valgus
- Los Hallux Rigidus,
- Los dedos en garra, los dedos en mazo o martillo
- La enfermedad de Freiberg
- Los neuromas de Morton
- El juanetillo de sastre
- La fascitis plantar y el espolón calcáneo
- Los callos o hiperqueratosis ya que aunque no los quitamos con la cirugía directamente, al corregir la forma y el apoyo del pie los callos desaparecen por si solos y de manera definitiva.
- Manejo del pie diabético en sus fases iniciales.
Para realizar el diagnostico de sus problemas del pie, su médico realizara una exploración física que incluye no solo la exploración estática de su pie, sino la exploración de su marcha y la plantoscopía. Además le solicitará estudios de rayos X y en casos selectos otro tipo de estudios de imagenología como la Resonancia magnética o la tomografía computada.
Posterior a la cirugía el paciente puede esperar el utilizar un vendaje y zapato especialmente diseñado para esta cirugía por al menos 4 semanas. El vendaje deberá ser cambiado por su cirujano de manera semanal. En cada visita se le irán dando las indicaciones de los ejercicios de rehabiitación de acuerdo a su evolución.
De acuerdo a los estudios que hemos realizado con la ayuda y participación de nuestros pacientes, sabemos que el 88% de nuestros pacientes se encuentran satisfechos con los resultados de su cirugía, que el 100% de nuestros pacientes mantuvieron la movilidad de sus articulaciones y el dolor de sus pies disminuyó importantemente. Estos datos han sido presentados en múltiples foros tanto nacionales como extranjeros, poniendo a nuestro equipo de médicos a nivel de los especialistas internacionales, y nuestros resultados en muchos rubros, superiores a los presentados por otros grupos internacionales.

El diagnóstico de juanetes se realiza clínicamente mediante una adecuada exploración física, y la toma de estudios de radiología para realizar un diagnóstico de precisión y establecer el tratamiento adecuado para cada pie. En los casos severos que produzcan dolor al paciente, el tratamiento definitivo es quirúrgico y en muchos casos puede realizarse mediante

Con cada paso que damos el dedo gordo soporta el doble de nuestro peso en su pequeña articulación, a pesar de esto normalmente no nos damos cuenta de su trabajo hasta que presenta algún problema. En el Hallux Rigidus el movimiento de la articulación del dedo gordo se ve limitado lo que origina dolor, pérdida de fuerza y en casos avanzados limitación para caminar. De acuerdo al estadio de la enfermedad se pueden presentar diversos síntomas como: Dolor y rigidez del dedo gordo al caminar, mantenerse de pie, inclinarse, etc., que se intensifican con el frío o la humedad. Aumento de volumen a nivel del primer dedo; dolor, incluso durante el descanso, dificultad para usar calzado, ya que se desarrollan exostosis (sobre-crecimiento) en el hueso, es especial el dolor al utilizar zapatos de tacón alto. En casos severos el dolor puede irradiarse a la rodilla o cadera al presentar el paciente una marcha anormal o cojera. En muchos pacientes este es un padecimiento frecuente en la familia, en otro se debe al uso excesivo de la articulación al permanecer largos periodos con el dedo flexionado o secundario a algún traumatismo.
Se produce cuando los bordes de la uña del dedo, generalmente del dedo gordo del pie, crecen de manera anormal "clavándose o enterrandose" en la piel vecina, dando lugar a inflamación, dolor y son susceptibles de infectarse. El realizar una extracción parcial de la uña solo ofrece un alivio temporal para el problema de la uña encarnada y por el contrario puede favorecer graves infecciones.